EXEMPLEADA DE MBURUVICHA RÓGA ROMPE EL SILENCIO TRAS SU DESPIDO.
Denunció supuesta coacción y abuso de autoridad.
Luz Maribel Candado Romero, excoordinadora de Mburuvicha Róga, denunció haber sido acusada injustamente de apropiación de una millonaria suma de dinero. En declaraciones a ABC, relató que ella y sus familiares directos fueron sometidos a pruebas poligráficas durante varias horas, que no recibieron compensación económica tras su desvinculación y que, hasta el momento, se encuentran sin empleo ni abogado.
Candado Romero indicó que inició su relación laboral con la familia presidencial en diciembre de 2019, en la residencia privada ubicada en Santísima Trinidad, desempeñándose en tareas domésticas durante más de tres años; su salario fue registrado en el Instituto de Previsión Social recién en 2022. Tras la asunción de Santiago Peña como presidente, pasó a integrar el Gabinete Civil de la Presidencia de la República como coordinadora.
Según su relato, sus funciones incluían la coordinación de cuidados en la residencia presidencial y en la propiedad de verano del mandatario en San Bernardino.
Candado Romero contó que trabajaba con normalidad hasta julio de 2025, cuando fue acusada de robar sobres con dinero en efectivo. Ella y su hijo, quien trabajaba como mozo, junto con su esposo, Hugo Romero, guardia privado fuera de Mburuvicha Róga, fueron sometidos a pruebas poligráficas el 23 de julio de 2025, permaneciendo varias horas en la evaluación sin que se les comunicaran resultados precisos y que, durante el proceso, se le pidió declarar sobre hechos de los cuales dijo no tener conocimiento.
Además, recordó que previamente se habían encontrado sobres con dinero en la residencia presidencial en octubre de 2024 y febrero de 2025, que permanecieron guardados en un sector privado hasta junio de este año. Romero aseguró que nunca conoció el origen del dinero ni otros detalles.
Desde la vocería presidencial no hay comunicado oficial sobre el caso ni sobre las medidas internas adoptadas tras la salida de los empleados.
Hugo Romero, quien alegó que no tenía relación con el asunto porque se desempeñaba como guardia privado, denunció que tanto él como su familia fueron humillados y perjudicados por el proceso. Señaló que fue desvinculado de su trabajo y afirmó que su despido fue impulsado por la cercanía de su jefe con el presidente Santiago Peña.
“Prácticamente, decir que nos humillaron es poco. Trituraron a la familia. Nos enterraron vivos. El presidente pidió mi cabeza y mi trabajo, aunque laburo en un sector privado. Fui desvinculado porque mi jefe es amigo del presidente Santiago Peña”.
Comentó que participaron en las pruebas de polígrafo el teniente coronel Hugo Sostoa, jefe de seguridad del presidente, junto a otros oficiales militares, el teniente coronel César Portillo y a la teniente primera de justicia militar, Sonia Liz Benítez Arguello.
“Los poligrafistas no son fiscales ni jueces para acusar y declarar culpables a alguien. Esto fue un circo armado y un montaje para perjudicar a Luz. Si esto no es un abuso de autoridad excesivo, ¿qué es? Si esto no es terrorismo de Estado, ¿qué es?”, aseveró.
Finalmente, advirtió que responsabiliza a las autoridades involucradas por cualquier daño que pudiera ocurrirle a él o a su familia. “Si llega a pasarme algo a mí o a mi entorno, los responsables son Santiago Peña, Leticia Ocampos, el teniente coronel Sostoa y los poligrafistas”.
Por otro lado, Arnoldo Wiens arremetió contra Peña tras el escándalo
«Corrupción presidencial, dinero sucio, abuso de poder y violación de derechos. Eso es lo que expone la investigación ‘Los Sobres del Poder’. Yo respaldé su candidatura. Recorrí el país pidiendo votos para usted y, como cientos de miles de paraguayos, deposité mi confianza en su proyecto. Hoy me siento traicionado. Señor presidente Santiago Peña, esta situación vergonzosa debe ser esclarecida y las responsabilidades asumidas», expresó en X.
